Palabras de Victoria Delicado en el homenaje a los Brigadistas Internacionales en Albacete

SALUDO DE LA CIUDAD DE ALBACETE A LOS BRIGADISTAS Y AMIGOS DE LAS BRIGADAS INTERNACIONALES

Me siento honrada y agradecida por tener la oportunidad de dirigirme a ustedes. La ciudad de Albacete agradece y reconoce la lucha y el compromiso de los brigadistas y hoy estamos aquí los concejales de dos fuerzas políticas representadas en el Ayuntamiento de la ciudad, concejales del grupo municipal socialista y quien os habla, portavoz de Izquierda Unida, para expresar este reconocimiento.

Quiero transmitir también mi admiración, respeto y apoyo a quienes honráis la memoria de estos luchadores de la libertad: promotores de este encuentro y responsables de este importante movimiento de asociaciones memorialistas. Los brigadistas que fueron llegando a Albacete hace 75 años, de distintas edades, ideologías, culturas y tradiciones tuvieron, todos ellos, la lucidez de comprender la importancia de la defensa de la República española en 1936 frente al totalitarismo fascista que avanzaba en Europa y tuvieron el arrojo y valentía de comprometer su vida en un frente de guerra para defender la democracia, la justicia y la libertad que representaba la II República española.

Una República que supuso avances considerables en materia de libertades y derechos sociales para la población española, que fueron truncados por un golpe fascista que veía una amenaza en la pérdida de los privilegios de las clases dominantes.

 

La experiencia de las Brigadas Internacionales ha traspasado fronteras y generaciones y su ejemplo ha servido para ilustrar el camino a otras luchas solidarias y altruistas como han sido las experiencias de brigadas de paz que el movimiento de solidaridad internacional y cooperación al desarrollo han puesto en marcha en diferentes lugares del mundo para denunciar injusticias, apoyar procesos de emancipación o enfrentarse como escudos humanos a atropellos de derechos humanos o a guerras. El apoyo a los movimientos de independencia del pueblo saharaui, por la resolución del conflicto en palestina, la solidaridad con la revolución sandinista en los 80 y el movimiento zapatista más recientemente, o las nuevas luchas por la defensa de la tierra en diversas comunidades indígenas de América y África tienen ese componente de contar con la solidaridad internacional.
Frente al capitalismo que estimula el triunfo del individualismo representado en “el sueño americano”, el testimonio de los brigadistas apuesta por el altruismo, la lucha colectiva, el apoyo a los más débiles, la defensa del sujeto colectivo y su dignidad. Ojalá las nuevas generaciones se eduquen en esa generosidad y valentía que puede resumirse en la frase: “Nada humano me es ajeno”.


En un tiempo de crisis y amenazas sobre los derechos sociales vuestra lucha tiene una enorme importancia que debemos recordar y convertir en valor colectivo. Por eso merece la pena apoyar el trabajo de grupos como el CEDOBI, de la UCLM. Los cambios políticos recientes en nuestro país pueden dejar huérfano de apoyo económico e institucional este centro de investigación y documentación que orgullosamente se ubica en nuestra ciudad y en la Universidad de Castilla La Mancha. Con mi modesta contribución y en mi doble condición de concejala del Ayuntamiento y profesora de esta universidad (en la que trabajo desde hace más de 20 años) me comprometo a seguir apoyando y colaborando con el CEDOBI y hago un llamamiento a que la sociedad civil tire de las instituciones por la continuidad y crecimiento de este centro. Una fórmula que puede ser muy útil es constituir una asociación de apoyo al CEDOBI, para que quienes trabajan en ese centro cuenten con un grupo colaborador que pueda canalizar la contribución de quienes no somos especialistas en historia, sino simplemente admiramos y valoramos la experiencia y testimonio de las Brigadas Internacionales y creemos que merece la pena enfrentarse a la desmemoria. Parafraseando a Galeano diríamos que el CEDOBI contribuye “a que esta democracia no tenga miedo al recuerdo y a que la sociedad española no enferme de amnesia”. La transición española se construyó negando cierta memoria que ya es hora de afrontar y las asociaciones memorialistas son pioneras en esa labor que hay que apoyar.
Sólo quienes no reconocen el totalitarismo del golpe de estado que frustró la experiencia de la II República española, pueden ignorar el valor humano y ético de las Brigadas Internacionales. Espero para mi país un futuro republicano con más justicia, libertad y democracia, valores y principios que hay que seguir defendiendo y construyendo día a día.


Gracias por vuestra lucha, compromiso y testimonio de vida.


Thank you for your struggle, commitment and testimony of life.


Merci beaucoup pour votre combat, attachement et témoignage de vie.