Ni queremos ni podemos conformarnos

Las leyes habían dejado de consagrar la división sexual del trabajo por la que las mujeres se ocupaban del ámbito doméstico y los hombres de las tareas productivas. El estado del bienestar se afianzaba poco a poco universalizando la educación, la sanidad, las pensiones y la atención a la dependencia. Apenas habíamos llegado a ese punto en el que avanzaba la participación de las mujeres en el mercado laboral y con ello alcanzaban mayores cuotas de igualdad y libertad, cuando nos vemos en la necesidad, no ya de seguir mejorando, sino de impedir un enorme retroceso con una vuelta a la situación de muchos años atrás.

En este sentido hemos de traer a colación la relación directa entre la tasa de paro y la baja tasa de actividad femenina, de un lado, y el gasto per capita en protección social, por otro, siendo imprescindible un mayor gasto social en ámbitos como los servicios sociales, la educación, sanidad y atención a las personas dependientes para combatir el paro de las mujeres y elevar la tasa de actividad femenina. Existe una relación directa entre el nivel de desarrollo del Estado de bienestar y el reconocimiento de la autonomía e independencia de las mujeres.
Sin embargo con absoluta desconsideración a los servicios públicos y sus efectos sobre las condiciones de vida de la ciudadanía, en el ámbito de Castilla-La Mancha la Sra. Cospedal ensaya lo que previsiblemente será la política general del Partido Popular, tras su anunciada victoria el 20-N. Y esta no es otra cosa que recortes sociales, lo que repercute en toda la sociedad pero, especialmente, sobre la libertad y la autonomía de las mujeres.

La crisis sirve al Partido Popular de justificación para toda su actividad política y para eliminar instituciones que suponen control y transparencia sobre la actuación política. En esta clave entendemos la anunciada desaparición de la Defensoría del Pueblo, garante, entre otras funciones, de la evaluación del impacto de género, cuyo objetivo es comprobar si el enfoque de género, se ha tenido en cuenta a lo largo de la elaboración de una ley o norma, de tal manera que se pueda prever sus posibles efectos sobre la vida de unas y otros, y en caso necesario corregirlos.
La crisis es también la excusa para incumplir los acuerdos con los sindicatos mayoritarios, vulnerando derechos contemplados en la Constitución Española al atentar contra la libertad sindical y el derecho a la negociación colectiva de los y las empleadas públicas.
Del mismo modo, les sirve de pretexto, para permitirse el impago de subvenciones y nóminas de trabajadoras y trabajadores, asfixiando la economía familiar de cientos de personas y provocando el cierre de servicios sociales imprescindibles en una sociedad integradora y atenta a las desigualdades y a su superación, como son los Centros de la Mujer o los programas y proyectos de las organizaciones juveniles, sociales y de atención a la violencia de género.
Y no se quedan atrás en el anuncio de lo que será una política social retrograda en terrenos como la igualdad y la justicia social, anunciando la modificación de leyes como la que reconoce el matrimonio de parejas del mismo sexo y la Ley Orgánica de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo, desconsiderando el derecho a decidir de las mujeres, y el de todas las personas a tener o no descendientes y el número de ellos.

Finalmente la Sra. Cospedal inmersa en su discurso catastrofista desoye las propuestas de los Sindicatos para salir de la crisis de otra manera, propuestas también enunciadas por movimientos como el 15M o Democracia Real y que son entre otras una fiscalidad más progresiva donde paguen más los que más tienen; perseguir el fraude fiscal; gravar con impuestos las transacciones económicas y financieras especulativas; exigir a la Banca créditos para las familias y las empresas; modificar la legislación de desahucio y devolver el gobierno a los Gobiernos elegidos para que no gobiernen los mercados.
Propuestas posibles y certeras para salir de la crisis sin que sea a costa del sacrificio de las y los de siempre, por ello decimos alto que ni podemos ni queremos conformarnos y el día 27 de Octubre acompañaremos a los sindicatos en la manifestación e invitamos a la ciudadanía a sumarse a esta convocatoria.

Feministas Albacete:

Dolores Cachero Buil, M. Victoria Delicado Useros, Mónica de la Calzada del Pino, M. Teresa Márquez González, Carmen Oliver Jaquero, M. José Sánchez Hernández, Yahui y Suny González García.